Los aceites esenciales se pueden usar en el baño, para realizar masajes, por vaporización e inhalación o para perfumar.
También se pueden utilizar vía oral, siempre que sean quimiotipados y con mucha precaución, siguiendo siempre las indicaciones del fabricante.
Masaje
Es el empleo más popular, favorece la absorción de los aceites por la piel.
Para ello diluiremos el aceite, o los aceites elegidos en un tarro, en la proporción de 6 gotas de un aceite esencial o 6 gotas de la suma de varios aceites esenciales, por cada 10 ml de aceite base, también llamado aceite portador.
Además podemos crear nuestros propios ungüentos utilizando una crema base o un aceite corporal.
Baño
Cuando mezclamos esencias con agua caliente se absorben con gran rapidez a través de los poros dilatados, al mismo tiempo también se inhalan los vapores que desprenden.
Preparamos un baño caliente y añadimos unas 10 gotas de aceite esencial removemos un poco con la mano y listo.
Luego, nos relajamos en el baño unos 10 minutos para dar tiempo a que los aceites actúen.
Vaporización
La vaporización de los aceites puede crear ambientes agradables y refrescantes, para ello podemos utilizar quemadores de aceite o difusores eléctricos.
Inhalación
La inhalación es un método tradicional en el uso de los aceites esenciales.
Para ello podemos poner un par de gotas sobre un pañuelo e inhalar.
También podemos poner unas gotas en un recipiente con agua muy caliente, cubrir la cabeza con una toalla y respirar durante unos 5 a 10 minutos.
Perfumar
Podemos perfumar cualquier habitación al poniendo unas gotas de aceite esencial en una vela.
También podemos poner 2 gotas en una bombilla de la luz, añadir cuando la bombilla este apagada y después encender.
Vía oral
Utilizar solo aceites quimiotipados de uso alimentario siguiendo las instrucciones del fabricante.
De manera general se tomarán máximo 3 gotas siempre diluidas, nosotros aconsejamos mezclarlas con miel o con aceite de oliva antes de tomar.